Hoy nos toca hacer interconsultas a los pacientes ingresados, así que nos ponemos calzado cómodo y después de pasar la consulta ambulatoria, nos vamos a pasear por las plantas de hospitalización.
Se llamaba María José, tenía 86 años y a ella lo que le dolía era la barriga. Cuando le dijimos que veníamos de dermatología para verla, se extrañó: “Pero si a mí me duele la barriga y no puedo ir de vientre! En la piel no me pasa nada”. Y ciertamente, estaba ingresada por dolor abdominal, vómitos y disnea progresiva hasta hacerse de reposo, así que esas lesiones que le habían salido en el ombligo eran una mera anécdota para nuestra paciente. Además, no le dolían. Le manchaban la ropa, eso sí, pero nada más. No estaba segura de cuándo aparecieron, quizá un mes antes, e iban creciendo de manera progresiva. Más recientemente, le apareció otra un poco más abajo. Pero a ella le dolía la barriga, nos remarcó.
Cuando le explicamos que nos habían llamado precisamente por eso, se resignó a que la exploráramos. Efectivamente, tenía varias lesiones ulceradas, de superficie friable, exudativas, en el ombligo y en la zona hipogástrica, alrededor la piel se veía eritematosa e infiltrada al tacto. No le dolía, y tampoco sangraban activamente. No evidenciamos otras lesiones similares y nada más nos llamó la atención. María José tenía la piel clara, era hipertensa en tratamiento con amlodipino y en su vida sólo la habían operado de apendicitis años ha. Pero últimamente no se encontraba bien, había perdido el apetito, estaba cansada y en los últimos meses se había adelgazado (normal, casi no comía), y además le costaba ir al baño, hasta que la cosa se agravó y terminó en el hospital.
Os podría poner aquí todas las exploraciones complementarias, pero entonces sería demasiado sencillo (y ya he dado demasiadas pistas). ¿Qué os parece? ¿Le hacemos una biopsia o la dejamos tranquila? ¿Es cuestión de curas tópicas o de bisturí? El miércoles lo sabremos, o si no, en este enlace.
¿Qué pasa si juntamos un volcán y un timelapse? Pues que nos sale esto...
Dawn of Fire from Tyler Hulett on Vimeo.
Nódulo de la hermana Maria José, es decir, una cutánide de una neoplasia abdominal. Seguramente por sus síntomas, de origen gástrico o de colon. Gracias por un caso tan interesante. César.
ResponderEliminarHola Rosa!
ResponderEliminarCuando he vjsto la foto, sin entrar a los detalles ya digo: uff vaya piercing mas infectado....la forma igualito....jaj. veo que tiene 86 años y digo....pues ya no.....vaya risa!!!!
Saludos!
Qué interesante!! Y yo que pensaba que solo existía en los libros... pobre mujer.
ResponderEliminarSI LESIONES SON RECIENTES - METASTASIS CUTANEA VS SI LESIONES SON DE AÑOS DX DIFERENCIAL MELANOMA AMELANOCITICO CON LESION SATELITE Y METASTASIS ABDOMINAL ¿?
ResponderEliminarnódulo de la hermana Ma José,metástasis cutánea de tumor intraabdominal...de esos que no se ven "nunca"
ResponderEliminarNeo de estomago
ResponderEliminarMetastasis de tumor digestivo o ginecólogico.Mal pronóstico.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con el primer comentario. Era la "típica pregunta MIR" de al menos unos cuantos años. Nódulo de la hermana Mª José. (personalmente no he visto ninguno). Expresión de metástasis cutánea de una neo, posiblemente gástrica por la clínica que se comenta (s. tóxico asociado).
ResponderEliminarSister Mary joseph's node. Nódulo de la hermana Mº José o Josefina (lo he visto traducido de todas las maneras). Reflejo de una neo intraabdominal. Único epónimo médico descubierto por una enfermera.
ResponderEliminarpioderma gangrenoso e relación con enfermedad inflamatoria intestinal.
ResponderEliminar